Playitas desiertas para despedir el verano

Llegan los últimos días para disfrutar un poco de playa por eso te traemos tres destinos cercanos a Buenos Aires para relajar un fin de semana con arena, sol y mar. Se trata de destinos poco explotados pero con una belleza natural sobrada que permitirá encontrar el descanso y la paz.

Costa Esmeralda se encuentra en el límite de Pinamar. Es un destino perfecto para combinar playa, bosques y tranquilidad. Iniciar el día con una caminata por sus senderos acompañados de pinos, árboles y el aroma a vegetación junto al mar es la antesala de una relajación total. La actividad es apaciguada en este lugar. Quienes buscan calma la encontrarán. Se puede caminar por la orilla del mar, leer un libro y compartir algo rico en los paradores sencillos pero perfectos para la ocasión con la vista del atardecer completamente límpido. Costa Esmeralda cuenta con espacio deportivo donde se puede acceder a canchas de tenis, básquet y fútbol, gimnasio, juegos para niños, y un sector de gastronomía con foodtrucks.

Entre Mar de las Pampas y Mar Azul, se encuentra casi escondido Las Gaviotas, un pequeño poblado con plantaciones de álamos, largas playas y el mar suave contagiando de apacibilidad el lugar. No hay forma que el stress llegue a Las Gaviotas, por eso sus alojamientos están sumergidos en los bosques de álamos que con el sonido del viento invitan al descanso. Por el atardecer hay paradores para compartir algo rico y la actividad más recreativa obliga a salir hasta Mar de las Pampas.

A unos 30 kilómetros de Necochea por camino de tierra, aparece Los Ángeles, un poblado pequeño agreste donde se mezcla el campo y el mar, logrando una fisionomía única. Las vacas y los caballos pasean por las dunas, mientras el mar azul parece impoluto. Un lugar para desconectar con playas desiertas y el sonido de las olas junto con el viento.